martes, 18 de mayo de 2010

Aleteando en bikini

Ahora que parece que vuelve el calorcito, que mejor que retomar "Aleteando" para hablar de alguna de sus consecuencias más directas.

Como todos los años por estas fechas, se pone en marcha la llamada “Operación Bikini”. Dicho fenómeno es por el cual millones de personas, mayormente del género femenino, intentan perder los kilos que consideran que les sobran de cara al verano.

Así, año tras año, nos ponemos de acuerdo para rendirle culto al cuerpo en masa. Para ello utilizaremos dietas, ejercicios... Lo que sea con tal de estar más delgados. El propósito de esto, es lucir bien en las playas con nuestro bañador, trikini o lo que cada uno lleve.

Bien, ha quedado bien descrito, creo que no me he dejado nada. Exponiendo estos hechos me preguntó, ¿somos gilipollas? No cabe otra respuesta que la afirmativa. Veamos si lo he entendido todo, ¿decidimos cuidarnos (apartemos ciertas dietas de esto) un periodo muy limitado del año para estar guapos delante de desconocidos?

Siempre he considerado el culto al cuerpo, como una soberana gilipollez, obviamente excluyendo la salud y el encontrarse bien con uno mismo. Entiendo que la gente que sigue esta “operación” por sentirse bien, no se ve desnuda el resto del año y por eso hasta que no se prueba el bikini no ve los “problemas”.

Es escalofriante la importancia que se le da a esto. Oyes hablar de ello todos los días, anuncios por doquier en cualquier medio... No quiero ir aquí de descubre-conspiraciones, pero esto es una clara manipulación para tenernos pensando en estupideces en vez de preocuparnos por cosas que sí importan. Quién quiere cuidarse, no lo hace meses antes del verano, o sí va a ir a la playa o derivados, lo hace todo el año. Los demás, caemos en campañas de publicidad que nos dicen lo que tenemos que hacer. Y llega un momento en que todo esto llega a cabrear. Millones de personas con dudas sobre su belleza, ¡sobre algo que es relativo!

Me comen la polla todos los anuncios de marcas que te enseñan como deberían ser físicamente las personas, pero es triste ver las puertas que te abre ser guapo, muchas más que ser inteligente. La belleza no debería ser más que otro complemento del ser humano que se da por hecho que cada uno lo tiene diferente y punto. Algo sin trascendencia.

6 comentarios:

Qnk dijo...

tuuuu calla q la operacion bikini me salva la vida laboralmente hablando! xDD

DeStroker dijo...

Anda que... Alimentando el culto al cuerpo y cobrando por ello... xdxd

Qnk dijo...

no no no, yo no alimento nada, yo solo digo lo q hay, la realidad es fea y cruda, q quieres q le haga! xDD

Qnk dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...

Suerte es que algunos en su sano juicio sean capaces de discernir entre lo que es culto al cuerpo y lo que es sentirse bien consigo mismo.
La realidad es que, en el mundo real que nos toca vivir, el sentido rey por excelencia del ser humano es la vista. La vista pese a ser un pequeñísimo sentido (comparado con el tacto que se transmite por el órgano más grande de nuestro cuerpo, la piel) es el 90% de la capacidad sensorial de una persona adulta. Da igual lo que creas oír que los ojos darán mayor prioridad y una respuesta más rápida a esa información para estimular la reacción eléctrica sobre cualquier otra información a través de cualquier otro sentido.
Basándonos en esa realidad (que es científica) determinaremos que todo en esta vida entra por los ojos. De ahí el apocalipsis social de la colectiva "operación bikini"
NO querido amigo, NO es un atropello que la gente quiera verse mejor, quiera parecer más musculosa, más morena, más atrayente, más llamativa en definitiva hacer resaltar en ti lo que entra por el ojo de otro. Y si, quién no se ha fijado nunca en una talla 110 de sostén, en un culo para cuatro caderas, en unos bíceps de anfetaminado, en un cuerpo de modelo o en una realidad alternativa donde dominen mujeres como Jesica Alba, Scarlett Johansson, Beckhan o cualquier otro. O sin ir más lejos, busca entre tus amigos o familia quien no tiene una 110, no es un culo perfecto, no tiene unos pechos bonitos o todo lo contrario... Es complicado pero cierto. Todos conocemos a gente así.
Con respecto a lo que comentas sobre que ser guapo te abre más puertas que ser inteligente es evidente que si. La inteligencia no se demuestra con la vista por mucho que se usen camisetas con mensajes y con fotos de Einstein, pero lo atractivo si se muestra con un cuerpo musculoso, un pelo cuidado, una sonrisa blanca y dentadura cuidada, una ropa adecuada (cada grupo social la suya y cada grupo social sus cánones de belleza) en definitiva que primero te miro y luego te hablo…
Concluyendo, me encanta la seguridad aplastante que denotas en i mismo, sin complejos físicos ni (parece) psíquico. Demuestras ser una persona que no se rige con los cánones sociales de belleza o de modas. Pero estoy convencido de que pecas igual que todos nosotros de encajar en tu estilo de vida siendo, poquero, cani, flamenquito, electro, heavy, bakala, moderno, chic o cualquier otra tendencia de moda urbana… Mírate en un espejo y te darás cuenta de que aunque tu grupo social no sea el de los anfetaminados de gimnasio o los vegetarianos come puerros, tu forma de vestir, tu físico, tu forma de pensar no dejan de estar enmarcados en una realidad social que te ha formado como eres tú. NO quieres ponerte moreno, lucir abdominales, tener unas tetas imponentes y prefieres vestir ajustado, o con colores llamativos o de negro con camisetas de Metallica? Perfecto, pero date cuenta de que tanto tu, como yo cojeamos del mismo pie, pero con distinto calzado.

DeStroker dijo...

Bueno, antes de nada, gracias por este comentario. Siempre es una alegría ver que a alguien le ha interesado tanto como para responder de la manera en lo que has hecho.

Lo primero tras verlo, me hace ver lo que venía suponiendo desde hace tiempo, y es que tengo que escribir profundizando mucho más. Generalmente no planeo lo que escribo y me quedo muchas veces en la base, y eso se nota mucho en este texto. Pero respondiendo ya al comentario:

Considero que el problema no viene por la vista, aunque comparto contigo en el tema de que cualquier cosa que entra por los ojos llama más la atención, absolutamente cualquiera. Pero está en nuestras manos darla una importancia u otra, independientemente de la sorpresa/impacto que nos haya causado. Todo el culto al cuerpo y demás deriva de nuestra cultura, una cultura que promociona el culto al cuerpo. Yo me centro en el lugar donde vivo, y en este país, y en general en lo que llamamos occidente, el culto al cuerpo es ley. Esto no ocurre así en otro tipo de culturas donde la manera de vestir importa bastante poco ya que todos van iguales, por poner un ejemplo.

Te apoyas en sesgos de representatividad. Las tetas grandes llaman la atención más por ser algo poco común que por el tamaño en sí, además que es un tema de preferencias. También puede que me fije en una persona de metro cuarenta al igual que lo haría con alguien de dos metros diez y no porque quiera, desee ser como ellos.

Sobre el problema de la belleza frente a inteligencia, lo que has escrito es el procedimiento que se lleva, de acuerdo, pero es realmente fácil de cambiar si siquiera uno se molestara en conocer mejor al resto, y en cinco minutos la inteligencia de alguien se capta.

Y ya respecto al final, imagino que así de primeras, soy bastante “clasificable” por los demás debido a las formas de vestir, el pelo o cosas así. Ahora bien, lo que puedo asegurar es que nadie me dicta como hacerlo, salvo yo mismo.

Nuevamente mil gracias por el comentario.