viernes, 20 de noviembre de 2009

Aleteando a la moda

El sentimiento humano de pertenecer a un grupo se hace patente en especial a la hora de vestir. Por eso inventamos la moda, una excusa para ir todos iguales por ciertos periodos de tiempo. Un negocio de proporciones enormes. Y como somos medio gilipollas, lo aceptamos.

Mi idea de la ropa es que te haga sentir cómodo a la vez que a gusto contigo mismo. Pero esto no funciona así. Uno tiene que ir como van los demás para encajar, voluntaria, o involuntariamente. No existe la posibilidad de ir como a uno le apetezca. Si tienes gustos propios, tendrás que guardártelos porque si no serás rechazado.

Existen infinidad de lugares en los que si no vas acorde a unas normas de "etiqueta", no te darán siquiera esa opción del rechazo. En muchos casos tienes que disfrazarte para que un perdedor con cara de perdonavidas y toda la masa encefálica en los bíceps te deje entrar a escuchar una mierda de "música" y beber garrafón pagando a más de diez euros la copa.

Pero todo esto tiene su sentido, y es que tu ropa afecta a tus sentidos, es más, con traje la ópera se disfruta más ya que la oyes y ves mejor. Por no hablar de que rindes más en tu trabajo. Y ojo, esto no va contra los uniformes, aunque parece que en el caso de los hombres, el traje lo es.

Siguiendo con esto último, he oído más veces de las que recuerdo, que no es algo que me deba cuestionar cuando trabaje en algo serio, que es así y que yo no lo voy a cambiar. ¿Pero qué es esto? Son demasiadas las injusticias que se cometen en el mundo laboral como siquiera dar importancia a esto, pero no deja de ser algo que no debería pasar. Uno es igual de válido, igual de serio, competente etc., con traje o con unos vaqueros y una camiseta. Y me da igual cuales sean las reglas, aunque como todos, tenga que pasar por el aro por esto también.

Como todo, la ropa que usamos, es otra forma de identificarnos con la masa, y es que si mañana se abren tres tiendas de la tienda que no es igual, las tres estarán llenas. Sin complicarme mucho, por la calle en cinco minutos puedo ver dos o tres personas que visten de la misma forma. Y he escuchado bastantes veces a personas identificar la ropa de alguien por la tienda en la que se lo ha comprado. Llamadme lo que queráis, pero esto último no logro entenderlo. No nos engañemos, todas las tiendas famosas de ropa, venden lo mismo con soplapolleces diferentes.

Mi único propósito con estos textos, es demostrar que no pensamos por nosotros mismos, si no como nos dicen que tenemos que hacerlo, y lo manifestamos hasta en los aspectos más banales. Vestíos como os de la gana.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Baaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa.

Sé una oveja feliz! (O cabra) ;)

Muak.

Ibid.

DeStroker dijo...

Beeeeeeeeeeeeeeeeeeeee! :)

Anónimo dijo...

Cuando vi el anuncio me acorde de tu post: "mi ropa es la forma de domesticar mis emociones, ves?"
y mi pensamiento al verlo: será tooooontuco

PANDA

DeStroker dijo...

Diox! En serio hay anuncio así? Hice bien en dejar de ver la tele. Siempre pensé que habíamos llegado a un momento donde lo mejor eran los anuncios, ya ni eso :S