Aquí tenéis el final de esta historia, que espero que os guste mucho.
He empezado a levantarme antes para arreglarme a ver si así se fija en mí. De momento no ha habido manera...
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Hay una chica que no para de mirarme y empiezo a estar preocupado. Bueno, será casualidad. Además parece enferma, no sé que le pasa en la cara.
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Yo no sé como hacen estas cosas, pero es lo primero en lo que pienso cuando me monto en el tren. Como cuando yo lo cojo aún puedo sentarme, probaré a levantarme cuando él entre a ver si lo nota.
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Hoy cuando he entrado esa chica se me ha puesto al lado cuando ya iba sentada. Esto empieza a ser muy raro.
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Uff... Estoy muy nerviosa, no sé si entiende lo que trato de hacer... Llevo así varios días y nada...
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O el gato le ha hecho un cristo en la cara o aquí pasa algo raro.
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No puedo más, no puedo más, no puedo más...
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Ya son muchos días los que se me pone al lado y mirándome fijamente. Las marcas que tenía en la cara cada vez son más. Yo hoy entro por otro vagón.
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¿Dónde está? … … … Perdí el tren varios días y luego recorrí la línea de punta a punta... ¿Por qué no aparece?
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